Porteo seguro con ilustraciones
Porteo seguro es la expresión que reúne las maneras recomendadas para llevar al bebé en portabebés ergonómicos de tela. En esta guía ilustrada puedes conocer la forma segura, cómoda y recomendada para portear al bebé en cualquier tipo de portabebés.
BEBÉ VISIBLE / VÍAS RESPIRATORIAS LIBRES
Si bien no existe una evidencia científica que indique que el uso de portabebés está asociado con algunas causas de muerte de los bebés como la muerte súbita, en el mundo ha habido accidentes fatales por otros motivos: su uso incorrecto, particularmente en bebés pequeños.
Estos riesgos se aumentan cuando las vías respiratorias del bebé se restringen, o quedan tapadas por la tela o la piel de quien los lleva. La manera más segura de llevar a un bebé es cargarlo de manera vertical, y con la posibilidad de ver su cara en todo momento, colocada en una correcta posición. Y mucho se habla de proteger las vías aéreas del bebé que es porteado. La explicación es que durante sus primeros meses un bebé no puede controlar el peso y movimiento de su cabeza porque los músculos de su cuello todavía no han alcanzado cierta madurez y no le es fácil acomodarse de una manera que permita liberar sus vías respiratorias, si por algún motivo hubiera una obstrucción que no permita el paso del aire. Una obstrucción de aire puede ocurrir cuando la barbilla del pequeño se inclina hacia adelante y toca su propio pecho, circunstancia que dificulta el suficiente flujo de aire. También puede suceder si las piernas del bebé quedan enrolladas en contra de su propio vientre; si la cara del bebé queda comprimida por el cuerpo del usuario o por la misma tela del portabebés. Los bebés que tienen más riesgo de asfixia son aquellos que han nacido prematuramente, los que tienen problemas respiratorios y los menores de cuatro meses.
Observa en estas posiciones como el bebé está muy abajo, no tiene sus vías respiratorias libres y no se ve:
Estos riesgos se aumentan cuando las vías respiratorias del bebé se restringen, o quedan tapadas por la tela o la piel de quien los lleva. La manera más segura de llevar a un bebé es cargarlo de manera vertical, y con la posibilidad de ver su cara en todo momento, colocada en una correcta posición. Y mucho se habla de proteger las vías aéreas del bebé que es porteado. La explicación es que durante sus primeros meses un bebé no puede controlar el peso y movimiento de su cabeza porque los músculos de su cuello todavía no han alcanzado cierta madurez y no le es fácil acomodarse de una manera que permita liberar sus vías respiratorias, si por algún motivo hubiera una obstrucción que no permita el paso del aire. Una obstrucción de aire puede ocurrir cuando la barbilla del pequeño se inclina hacia adelante y toca su propio pecho, circunstancia que dificulta el suficiente flujo de aire. También puede suceder si las piernas del bebé quedan enrolladas en contra de su propio vientre; si la cara del bebé queda comprimida por el cuerpo del usuario o por la misma tela del portabebés. Los bebés que tienen más riesgo de asfixia son aquellos que han nacido prematuramente, los que tienen problemas respiratorios y los menores de cuatro meses.
Observa en estas posiciones como el bebé está muy abajo, no tiene sus vías respiratorias libres y no se ve:
Observa en esta posición la apertura cómoda y correcta de las piernas del bebé:
AJUSTE, TENSIÓN Y CUBRIMIENTO
Si el bebé está bien sostenido, serán mínimas las variaciones en el centro de gravedad del usuario y se tendrán menos puntos de presión en los músculos, lo que hará experiencia de llevar al bebé más confortable y segura.
Un acoplamiento seguro
En un buen portabebés permite que el pequeño quede ajustado de forma segura al cuerpo del usuario para que permanezca cerca de su centro de gravedad.
Entre más cerca esté del usuario, mejor será la sujeción, lo cual favorece una actividad que se da con naturalidad y evita movimientos innecesarios, caídas, sacudidas o impacto en sus pequeñas articulaciones, por ejemplo, al caminar por asfalto o en un piso duro.
Previene que el bebé se deslice dentro del cargador o sea empujado hacia su interior por una maniobra súbita como parar, girarse, inclinarse o simplemente caminar.
Una tensión idónea
La tensión es el otro elemento estrella del porteo seguro. Una correcta tensión garantiza la posición del bebé. Y la comodidad para quien portea, ya que el bebé se mantiene bien pegado, como una extensión del cuerpo del usuario y el peso del bebé no se separa del cuerpo ni se desplaza con el movimiento.
La siguiente ilustración te muestra observa en esta posición la apertura cómoda y correcta de las piernas del bebé. En la primera figura la tela de la bandolera es halada hacia abajo. Esto dificulta que los rieles superiores e inferiores de la tela corran fácilmente a la hora de ajustar. En la segunda figura se corre primero la tela hacia donde está el bebé y los rieles corren fácilmente para un óptimo ajuste.
AJUSTE, TENSIÓN Y CUBRIMIENTO
Si el bebé está bien sostenido, serán mínimas las variaciones en el centro de gravedad del usuario y se tendrán menos puntos de presión en los músculos, lo que hará experiencia de llevar al bebé más confortable y segura.
Un acoplamiento seguro
En un buen portabebés permite que el pequeño quede ajustado de forma segura al cuerpo del usuario para que permanezca cerca de su centro de gravedad.
Entre más cerca esté del usuario, mejor será la sujeción, lo cual favorece una actividad que se da con naturalidad y evita movimientos innecesarios, caídas, sacudidas o impacto en sus pequeñas articulaciones, por ejemplo, al caminar por asfalto o en un piso duro.
Previene que el bebé se deslice dentro del cargador o sea empujado hacia su interior por una maniobra súbita como parar, girarse, inclinarse o simplemente caminar.
Una tensión idónea
La tensión es el otro elemento estrella del porteo seguro. Una correcta tensión garantiza la posición del bebé. Y la comodidad para quien portea, ya que el bebé se mantiene bien pegado, como una extensión del cuerpo del usuario y el peso del bebé no se separa del cuerpo ni se desplaza con el movimiento.
La siguiente ilustración te muestra observa en esta posición la apertura cómoda y correcta de las piernas del bebé. En la primera figura la tela de la bandolera es halada hacia abajo. Esto dificulta que los rieles superiores e inferiores de la tela corran fácilmente a la hora de ajustar. En la segunda figura se corre primero la tela hacia donde está el bebé y los rieles corren fácilmente para un óptimo ajuste.
Cuando no hay brechas de espacio entre el cuerpo del bebé y el del usuario la posición es más cómoda y segura porque se evitan caídas y que el bebé quede muy abajo. En la primera figurita ves que sobra tela. Esto se corrige ajustando más la bandolera.
Cuando la tela está bien desplegada en el cuerpo de quien portea, la sensación de comodidad aumenta. A continuación podrás comparar:
Se trata de la posición propia de los bebés y la más saludable para su cadera con las piernas apoyadas y las piernas abiertas en un ángulo de 90° a su columna vertebral, las rodillas flexionadas en un ángulo de 45° (más altas que sus nalgas) y su columna vertebral redondeada (en forma de "C"). De esta manera la columna del bebé queda libre de presión. Si es un bebé pequeño, es imprescindible no forzar la abertura natural de sus piernitas, es decir, no abrirlas de manera que su extensión vaya más allá de sus caderas respetando la abertura que el bebé pueda tener por sí mismo.
Se trata de la posición propia de los bebés y la más saludable para su cadera con las piernas apoyadas y las piernas abiertas en un ángulo de 90° a su columna vertebral, las rodillas flexionadas en un ángulo de 45° (más altas que sus nalgas) y su columna vertebral redondeada (en forma de "C"). De esta manera la columna del bebé queda libre de presión. Si es un bebé pequeño, es imprescindible no forzar la abertura natural de sus piernitas, es decir, no abrirlas de manera que su extensión vaya más allá de sus caderas respetando la abertura que el bebé pueda tener por sí mismo.
Las figuras incorrectas te muestran que el bebé está inclinado hacia adelante, su espalda no está redondeada y sus piernitas se estrellan con el cuerpo del usuario quedando presionadas presionadas por la tela. La ilustraciones correctas te muestran la manera en que imitamos la posición de los brazos al cargar con un portabebés, tal cual la posición ranita descrita.
Las forma en que las anillas de una bandolera están colocadas puede marcar la diferencia entre un porteo cómodo y uno que no lo es. Si las anillas están muy abajo el bebé, además de rozar su cabeza con ellas, va a estar muy abajo. En cambio, si la tela está bien desplegada y los aros bien ubicados ligeramente más abajo de la clavícula será notoria la posición a nivel de seguridad y confort.
POSICIÓN RANITA O "M"
Se trata de la posición propia de los bebés y la más saludable para su cadera con las piernas apoyadas y las piernas abiertas en un ángulo de 90° a su columna vertebral, las rodillas flexionadas en un ángulo de 45° (más altas que sus nalgas) y su columna vertebral redondeada (en forma de "C"). De esta manera la columna del bebé queda libre de presión. Si es un bebé pequeño, es imprescindible no forzar la abertura natural de sus piernitas, es decir, no abrirlas de manera que su extensión vaya más allá de sus caderas respetando la abertura que el bebé pueda tener por sí mismo.
Se trata de la posición propia de los bebés y la más saludable para su cadera con las piernas apoyadas y las piernas abiertas en un ángulo de 90° a su columna vertebral, las rodillas flexionadas en un ángulo de 45° (más altas que sus nalgas) y su columna vertebral redondeada (en forma de "C"). De esta manera la columna del bebé queda libre de presión. Si es un bebé pequeño, es imprescindible no forzar la abertura natural de sus piernitas, es decir, no abrirlas de manera que su extensión vaya más allá de sus caderas respetando la abertura que el bebé pueda tener por sí mismo.
Las figuras incorrectas te muestran que el bebé está inclinado hacia adelante, su espalda no está redondeada y sus piernitas se estrellan con el cuerpo del usuario quedando presionadas presionadas por la tela. La ilustraciones correctas te muestran la manera en que imitamos la posición de los brazos al cargar con un portabebés, tal cual la posición ranita descrita.
COMODIDAD
Las forma en que las anillas de una bandolera están colocadas puede marcar la diferencia entre un porteo cómodo y uno que no lo es. Si las anillas están muy abajo el bebé, además de rozar su cabeza con ellas, va a estar muy abajo. En cambio, si la tela está bien desplegada y los aros bien ubicados ligeramente más abajo de la clavícula será notoria la posición a nivel de seguridad y confort.
LACTANCIA
Amamantar con el bebé dentro de un portabebés requiere que el pequeño tenga su cabeza descubierta y que no haya presión de su cara contra el cuerpo de la mamá o la tela.
PUNTOS CLAVES DE SEGURIDAD EN PORTABEBÉS
- Cuerpo del bebé alto, seguro y en posición vertical.
- A la vista.
- Poder besar la mejilla o la frente del bebé con facilidad.
- Cara descubierta y no comprimida por la tela, las franjas, el cuerpo del usuario o la ropa.
- Mentón del bebé lejos del pechito.
- Portabebés que permitan un movimiento natural.
- Centro de gravedad cerca del cuidador.
- Buen soporte a la columna del bebé.
- Rodillas del bebé flexionadas.
- Ajuste suficiente sin presión.
- Revisar el bienestar del bebé frecuentemente.
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¡A disfrutar del porteo seguro!
Imágenes y textos exclusivos de Portabebés AYU protegidos por una licencia y por normas sobre propiedad intelectual. Prohibido su uso comercial.
Por: Valeria Calderón, mamá, abogada y educadora certificada.
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