Porqué no llevar al bebé en posición de cara al mundo
Algunos de ellos nos preguntan también cual es el cargador más indicado para llevar a su bebé de cara al mundo ya que a sus pequeños les gusta explorar o descubrir su entorno con su espaldita contra la barriga de quien lo carga e incluso vemos con bastante frecuencia que los portabebés son utilizados con los bebés mirando al exterior. Siempre les respondemos que aún cuando muchos de los portabebés que vemos en el mundo, algunos ergonómicos, algunos convencionales y algunos que traen incluso instrucciones y publicidad mostrando lindos bebés con su cuerpo mirando hacia afuera, la elección de la posición de cara al mundo depende de quien portea.
Si bien es cierto que a muchos pequeños les gusta mirar alrededor y el estar al nivel de quienes los llevan les da una posición panorámica privilegiada, la posición mirando hacia el mundo no es la preferida por los instructores de porteo, salvo que se cumplan ciertos parámetros de ergonomía. A la hora de escoger, existen múltiples posiciones seguras que también lo permiten.
Estas son algunas de las razones que algunos expertos exponen de porqué no llevar a tu bebé mirando hacia afuera:
Estas son algunas de las razones que algunos expertos exponen de porqué no llevar a tu bebé mirando hacia afuera:
- La posición mirando al mundo no es segura y no brinda soporte a la columna del bebé, la cual está en crecimiento y desarrollo.
- El bebé puede recibir demasiado estímulo. Al mantener una posición fija no es capaz de controlarlo y acurrucarse en los brazos de quien lo lleva o esconderse, circunstancia que los puede poner muy irritables.
- Tampoco permite al bebé quedar sentado en una posición que suministre soporte para su cola y sus piernas.
- Al no respetar la posición mirando al mundo una posición natural de desarrollo, la columna se podría lesionar, cuando la posición ergonómica correcta que se utilizaría en un portabebé respeta el desarrollo natural de las caderas del bebé en crecimiento. Incluso en un varoncito podría generar problemas en los testículos, porque su entrepierna es arrastrada hacia arriba por la tela del portabebé.
- También fuerza la espalda del bebé en contra del pecho de quien lo lleva en el cargador y esto va en contra de la naturalmente redondeada posición de su espalda y no le permite un adecuado control de su cabeza si se duerme.
- Esta posición no favorece a quien portea porque cambia su centro de gravedad hacia abajo y lejos, dando la sensación de que el bebé es más pesado y no la sensación de que el cuerpo del bebé es una prolongación del cuerpo del cuidador.
Conclusión
Si vemos las características del cuerpo de un bebé en desarrollo, con su espalda curva y sus rodillas flexionadas y piernas abiertas, un buen uso de un portabebés debe permitir que las piernas del bebé queden más elevadas que su colita, en forma de "M" mayúscula o "posición ranita" y no utilizando una posición que sitúe todo el peso del bebé en la entrepierna y la base de su columna vertebral que está en desarrollo, comprimiéndola. Si vemos que un bebé necesita soporte en su cabeza mientras la sostiene y que su cuerpo esté alineado así su espalda se encuentre redondeada, en caso de utilizarse la posición de cara al mundo, el bebé nunca debe tener sus piernas estiradas, sino en abducción y flexionadas. Existen tecnologías que facilitan esta posición mirando al mundo y en caso de que no, el usuario debe imitarla. Algunas personas la usan por períodos muy cortos y vigilan si el pequeño tiene ya demasiado estímulo para cambiar de inmediato su posición.
En todo caso, los portabebés tienen variadas posiciones en las que tu bebé puede ver el mundo adecuadamente sintiéndose cómodo y estando seguro en tus brazos y "cerca de tu corazón y de tus besos". Por ejemplo, la posición a la cadera en un pouch, una bandolera, un fular, un portabebé asiático como el Mei Tai o un portabebés ergonómigo de estructura suave tipo mochila.
Otra posición que le facilita una visión del mundo es en la espalda o incluso al frente (pero mirando hacia ti), las cuales le permiten al bebé mirar por encima de tu hombro cuando lo desee o acomodarse para no recibir mayor estímulo.
Si vemos las características del cuerpo de un bebé en desarrollo, con su espalda curva y sus rodillas flexionadas y piernas abiertas, un buen uso de un portabebés debe permitir que las piernas del bebé queden más elevadas que su colita, en forma de "M" mayúscula o "posición ranita" y no utilizando una posición que sitúe todo el peso del bebé en la entrepierna y la base de su columna vertebral que está en desarrollo, comprimiéndola. Si vemos que un bebé necesita soporte en su cabeza mientras la sostiene y que su cuerpo esté alineado así su espalda se encuentre redondeada, en caso de utilizarse la posición de cara al mundo, el bebé nunca debe tener sus piernas estiradas, sino en abducción y flexionadas. Existen tecnologías que facilitan esta posición mirando al mundo y en caso de que no, el usuario debe imitarla. Algunas personas la usan por períodos muy cortos y vigilan si el pequeño tiene ya demasiado estímulo para cambiar de inmediato su posición.
En todo caso, los portabebés tienen variadas posiciones en las que tu bebé puede ver el mundo adecuadamente sintiéndose cómodo y estando seguro en tus brazos y "cerca de tu corazón y de tus besos". Por ejemplo, la posición a la cadera en un pouch, una bandolera, un fular, un portabebé asiático como el Mei Tai o un portabebés ergonómigo de estructura suave tipo mochila.
Otra posición que le facilita una visión del mundo es en la espalda o incluso al frente (pero mirando hacia ti), las cuales le permiten al bebé mirar por encima de tu hombro cuando lo desee o acomodarse para no recibir mayor estímulo.
Tu portabebés se convierte en una “AYUda” segura para cargar a tu bebé con las manos libres, si conoces el modo correcto de usarlo y lo haces con responsabilidad.
Comentarios
copiaron tu articulo tal cual y no te mencionaron. estan en fb tambien