Crianza y grupos de apoyo
Los grupos de apoyo y los círculos de mujeres están muy en boga y hay muchas razones para que existan. Es poco sabido, pero está comprobado que los grupos de crianza contribuyen al desarrollo de los países.
Por ejemplo los grupos orientados a la lactancia permiten aumentar sus índices de exclusividad y duración. ¡Y pareciera que existieran solo para brindar información y educación en lactancia! Sin embargo, además de enseñar sobre el manejo básico del arte de amamantar, tratan temas como el embarazo, el parto, la crianza, la nutrición, el crecimiento y desarrollo. Cumplen una función muy importante: ¡Son vitales para romper barreras! En los grupos de porteo además de aprender sobre porteo seguro, hay espacios de diversión en los que se aprenden nudos y variadas formas de usar los portabebés con las manos libres.
El motivo radica en que cuando una futura madre o una mamá que ya tiene a su bebé recibe apoyo de otras mujeres, ese apoyo es integral porque abarca lo psicoemocional además de lo físico.
Relax y libertad
Cuando las nuevas familias acuden a estos grupos, se encuentran con un mundo lleno de palabras alentadoras; reciben ayuda para resolver problemas; tienen un espacio de contención, de motivación y de escucha. En esas reuniones suelen sentirse más relajadas, nadie las juzga, pueden facilitar y compartir experiencias, preguntar más fácilmente y obtener respuestas.
Encuentran entornos donde no hay barreras para sacar adelante situaciones donde pueden sentir obstáculos, como por ejemplo la lactancia, particularmente cuando no hay soporte del entorno.También porque las personas que tienen bebés prefieren compartir sobre sus preocupaciones con personas que viven su misma etapa y el asistir a grupos influye en el proceso de tomar decisiones.
El apoyo social es importante no solo para el éxito de la lactancia. También para que una mamá, papá o cuidador sean contenidos y puedan más fácilmente contener al bebé. Este apoyo puede adaptarse individualmente o en grupo e implica una forma competente para promover y apoyar los procesos de personas que vienen de diferentes culturas, ambientes o estratos, que confluyen al unísono frente a sus necesidades como personas que crían.
Si las personas que lideran o asisten a grupos de apoyo sienten seguridad, felicidad, tranquilidad contención, además de que quienes acuden a este tipo de reuniones y desean amamantar suelen hacerlo más tiempo que otras que no, lo ideal sería que el mundo estuviera lleno de muchísima gente liderando, manejando y asistiendo a grupos de apoyo en crianza.
"Habilidades y competencias"
Por tratarse de una función social tan importante que sirve para mejorar el mundo, es ideal que quienes llevan a cabo esta labor tengan conocimientos, un buen entrenamiento y experiencia para poder brindar asistencia en técnicas de liderazgo y consejería, conozcan las formas profesionales del manejo de grupos de apoyo; los criterios para referir en caso de ayuda a quienes tengan la idoneidad para resolver problemas y conocimientos en habilidades de comunicación, entre otros, si no cuentan con esa capacitación.
"Silencia tu ego y tu poder emergerá"
Esta frase de la película Dr. Strange cae aquí como anillo al dedo. Quienes coordinan los grupos de apoyo, al centrarse en la función de ayudar, robustece la confianza de quienes participan en los grupos. Siendo su labor tan magnánima, trasciende lo personal y va más allá de consejos o de decir qué es lo que se "debería" hacer para que los participantes encuentren las respuestas por sí mismos.
Lo ideal sería no tener personas eternamente agradecidas que estén resaltando la labor de quien maneja estos grupos o los vean como los salvadores que rescataron su lactancia, su crianza u otros.
Porque las personas que asisten son las estrellas y porque el ego aquí debe cede paso a una función social importante que contribuye a que el mundo tenga bebés, mamás, papás y cuidadores más felices...
Por ejemplo los grupos orientados a la lactancia permiten aumentar sus índices de exclusividad y duración. ¡Y pareciera que existieran solo para brindar información y educación en lactancia! Sin embargo, además de enseñar sobre el manejo básico del arte de amamantar, tratan temas como el embarazo, el parto, la crianza, la nutrición, el crecimiento y desarrollo. Cumplen una función muy importante: ¡Son vitales para romper barreras! En los grupos de porteo además de aprender sobre porteo seguro, hay espacios de diversión en los que se aprenden nudos y variadas formas de usar los portabebés con las manos libres.
El motivo radica en que cuando una futura madre o una mamá que ya tiene a su bebé recibe apoyo de otras mujeres, ese apoyo es integral porque abarca lo psicoemocional además de lo físico.
En la imagen un grupo de apoyo en temas de porteo seguro. Petra explica la manera en que se retira una bandolera AYU. Denisa apoya a las participantes que comparten sus dudas sobre la necesidad de contacto de los bebés.
Relax y libertad
Cuando las nuevas familias acuden a estos grupos, se encuentran con un mundo lleno de palabras alentadoras; reciben ayuda para resolver problemas; tienen un espacio de contención, de motivación y de escucha. En esas reuniones suelen sentirse más relajadas, nadie las juzga, pueden facilitar y compartir experiencias, preguntar más fácilmente y obtener respuestas.
Encuentran entornos donde no hay barreras para sacar adelante situaciones donde pueden sentir obstáculos, como por ejemplo la lactancia, particularmente cuando no hay soporte del entorno.También porque las personas que tienen bebés prefieren compartir sobre sus preocupaciones con personas que viven su misma etapa y el asistir a grupos influye en el proceso de tomar decisiones.
El apoyo social es importante no solo para el éxito de la lactancia. También para que una mamá, papá o cuidador sean contenidos y puedan más fácilmente contener al bebé. Este apoyo puede adaptarse individualmente o en grupo e implica una forma competente para promover y apoyar los procesos de personas que vienen de diferentes culturas, ambientes o estratos, que confluyen al unísono frente a sus necesidades como personas que crían.
Si las personas que lideran o asisten a grupos de apoyo sienten seguridad, felicidad, tranquilidad contención, además de que quienes acuden a este tipo de reuniones y desean amamantar suelen hacerlo más tiempo que otras que no, lo ideal sería que el mundo estuviera lleno de muchísima gente liderando, manejando y asistiendo a grupos de apoyo en crianza.
"Habilidades y competencias"
Por tratarse de una función social tan importante que sirve para mejorar el mundo, es ideal que quienes llevan a cabo esta labor tengan conocimientos, un buen entrenamiento y experiencia para poder brindar asistencia en técnicas de liderazgo y consejería, conozcan las formas profesionales del manejo de grupos de apoyo; los criterios para referir en caso de ayuda a quienes tengan la idoneidad para resolver problemas y conocimientos en habilidades de comunicación, entre otros, si no cuentan con esa capacitación.
"Silencia tu ego y tu poder emergerá"
Esta frase de la película Dr. Strange cae aquí como anillo al dedo. Quienes coordinan los grupos de apoyo, al centrarse en la función de ayudar, robustece la confianza de quienes participan en los grupos. Siendo su labor tan magnánima, trasciende lo personal y va más allá de consejos o de decir qué es lo que se "debería" hacer para que los participantes encuentren las respuestas por sí mismos.
Lo ideal sería no tener personas eternamente agradecidas que estén resaltando la labor de quien maneja estos grupos o los vean como los salvadores que rescataron su lactancia, su crianza u otros.
Porque las personas que asisten son las estrellas y porque el ego aquí debe cede paso a una función social importante que contribuye a que el mundo tenga bebés, mamás, papás y cuidadores más felices...
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