Muñecos que llevan a sus bebés con propósito de sostenibilidad
AYU es una empresa de responsabilidad social que ofrece productos y servicios y trabaja en proyectos de sostenibilidad ambiental, económica y social. Conoce este exitoso proyecto de impacto social y cuidado del medio ambiente de AYU, que lleva muchos años en Colombia.
Se trata de una doble función: una ecológica y otra social, de apoyo a entidades que brindan protección a la niñez con un sistema de círculos de aprovechamiento.
Si compras un portabebés en la tienda de AYU: (tienda.babyayu.com), encontrarás que algunos de los portabebés vienen con un obsequio: una muñeca o muñeco pequeño que lleva a su bebé, que también podrás comprar. Posiblemente también lo recibas en alguna campaña promocional realizada por nuestros clientes ya que se regalan también en eventos promocionales, en rifas o se venden para recaudar fondos para a su vez atender otras labores sociales.
¿Quieres conocer a este fabuloso equipo?
Son para que los disfruten personas mayores de tres años, porque tienen piezas pequeñas. ¡Los adultos son los que más los quieren, como recuerdo de lo que es criar a los bebés brindando amor a través de los brazos.
No son perfectos, porque son retazos los que los componen y porque el trabajo es artesanal, aunque son insuperables por el gran mensaje que transmiten.
Cuando adquieres uno de estos muñecos, contribuyes a que podamos reutilizar material reciclado y cuidar el planeta con causas sostenibles, dar trabajo a personas que necesitan vivir de su arte, y darle un toque de alegría y ternura a tu corazón.
Estos muñecos pertenecen a un programa premiado de responsabilidad ambiental y social, parte del proyecto "AYU quiere a los niños".
La primera consiste en la utilización de material reciclado. Los portabebés AYU se producen con tela que viene reciclada, cuyo exceso de producción a su vez se recicla para hacer los muñecos. Adicionalmente con fantásticos retazos donados por la diseñadora de modas colombiana Isabel Henao, que ha participado con entusiasmo en este proyecto durante años y con frecuencia ofrece al equipo, la sorpresa de un tesoro de retazos que desbordan la imaginación de quienes los confeccionan.
En suma, son retazos que no se desechan, protegiendo el ambiente de desperdicios.
La segunda labor social, consiste en su creación por parte de artesanas de población vulnerable o mamás que trabajan desde casa que hacen manualidades. Las artesanas que apoyamos logran capacitaciones y encargos, y las mamás y cuidadores que necesitan ganar dinero al mismo tiempo que cuidan a sus bebés, se entretienen en casa con una labor paga, que además disfrutan.
Todas las personas que intervienen en su producción se benefician de este material y ganan dinero con su arte. Como si fuera poco, cuando no se venden a costo a entidades que brindan protección a la niñez que los quieren comercializar para recaudar fondos, se venden a clientes que apoyan el proyecto y las utilidades de su venta sirven para apoyar actividades de formación en valores con población vulnerable.
¡Además han dado la vuelta al mundo como símbolo de programas de apoyo a la lactancia o la crianza en brazos!
¿Quieres conocer a este fabuloso equipo?
Liliana Reyes en la estación de armado
Sofía Llanos y Valeria Pérez en el relleno
Sara Páez en decoración
Martha
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